jueves, 28 de febrero de 2013

EL ARTE DE ESCRIBIR

 
EL REENCUENTRO
 
 
Hoy volví a encontrarme  con una de mis escritoras favoritas, aunque debo confesar que  hace algunos días en mi taller de metafísica la recordé también.
Me emociono tanto recordar su "Querido Diario" así como el día en que la conocí en persona.
Cuando aún siendo estudiante de licenciatura me enteré de que Marcela Guijosa estaría en Puebla presentando un libro, me dí a la tarea de elegir uno de los tantos ejemplares de la Revista Fem para que me la autografiara. Cada una de esas revistas se convirtieron en grandes tesoros pero especialmente la que Marcela autografió.
Dice mi maestra de metafísica que todo sucede por alguna razón, todo tiene un por qué; muy cierto, revisando con mis alumnos de segundo semestre el horizonte de búsqueda "artículo de opinión y editorial", les pedí que llevaran un periódico o revista; yo también elegí una revista donde el editorial habla acerca de que noviembre es el mes de la lucha contra la violencia hacia las mujeres y las niñas y los niños, pero también cuestiona acerca de la violencia que la población, en general, padece por una mala administración pública. La violencia se refleja en la contaminación del medio ambiente, la pobreza, la desnutrición,...
Éste fue el ejemplo de editorial; pedí que buscarán un ejemplo de artículo de opinión y mientras los alumnos hojeaban sus periódicos y revistas, yo también buscaba en mi revista y apareció Marcela Guijosa.
En el tiempo del receso leí "Querido Diario" y recordé mis inicios en el feminismo, en la universidad; mi área de investigación de sexualidad y cultura, mi acercamiento a los estudios de género, mi descubrimiento y afición por Fem, pero sobre todo a mis queridas maestras que me presentaron esta otra forma de ver y vivir el mundo.
Para mí la vida es antes y después de Fem. Recuerdo que cuando leí que Marcela Guijosa y Elvira Hernández Carballido tenían talleres para escritores, yo deseaba poder estar en uno de ellos.
 Lulú (mi maestra de metafísica) dice que debemos darnos la oportunidad de hacer lo que en el pasado fuimos dejando sin realizar, ya que por eso llegamos a tener vacíos que nos van dejando insatisfechos; yo ahora estoy llenando el vacío que tenía por no haber ido a los talleres de escritores, gracias a la maestría de Lectoescritura, la estoy disfrutando y gozando al máximo.
Sé que me falta un buen camino por recorrer pero como señala Cassany (1989) ahora estoy leyendo como emisor, además comenzaré a reescribir con Marcela cada uno de sus textos, pues pienso seguir encontrándome con Fem. ¡Quiero llegar a pertenecer al grupo de los escritores!


miércoles, 20 de febrero de 2013


¿CÓMO APRENDER A ESCRIBIR?

Después de actualizarme en estas últimas semanas con respecto a cómo aprender a escribir, he podido rescatar las siguientes ideas:

Cassany señala que no hay mejor manera de aprender a escribir sino a través de leer a los escritores (a través de su ejemplo)  y así aprender de manera inconsciente pues esos aprendizajes son los que se convierten en significativos y parte fundamental de nuestra vida, inclusive compara este aprender a escribir con el cómo aprendemos a hablar.

Y qué decir de esta premisa de Smith “escribir es tan complejo, que no hay manera de enseñarlo”.

No logro recordar el nombre del escritor que señalo que él dejo de aprender cuando ingreso a la escuela pero es una idea que quiero enlazar con la siguiente duda que me asalta: ¿verdaderamente la educación media superior está contribuyendo al aprendizaje significativo de los adolescentes?, ¿será que deberíamos emprender una nueva reforma de las asignaturas de Lenguaje y Comunicación para que tomen en cuenta estas ideas tan profundas que plantean Cassany y Smith respecto al cómo aprender a escribir?

Tal vez deberíamos adoptar el planteamiento de nuestro curso emblemático de Lenguaje y escritura; pues además de acercarnos a la teoría, de manera lúdica, nos está proporcionando las herramientas básicas para deleitarnos con la lectura y escritura, tanto de los “otros” como de nosotros mismos.

Aprender a gozar y disfrutar el mundo maravilloso que es el de las letras y que como señala Bloom no solamente nos ayudara a ser capaces de juzgar y opinar por nosotros mismos sino además tendremos el deseo de convertirnos en mejores seres humanos día con día;  éste es uno de los grandes objetivos de la ficción literaria.

miércoles, 13 de febrero de 2013

 
 
EL PLACER DE LEER
 
Hace aproximadante siete años, al llegar al Bachillerato en el que actualmente laboro, me asignaron la materia de Literatura, en los primeros minutos de haber recibido la comisión sentí gran inquietud, tendría que ponerme a estudiar para desempeñar mi labor de la mejor manera posible.
Me gusto la Literatura porque se vinculaba muy bien con lo que es mi perfil, Ciencias Sociales y Humanidades; primero porque en nuestro pograma de estudios, cada corriente debe ser situada en un contexto histórico-social y me sentía "como pez en el agua". Con el tiempo fuí descubriendo cosas tan hermosas en la literatura que no tengo palabras para decir cuáles.
Pero de entre tantos aprendizajes que me ha dado ahora puedo decir que estoy totalmente de acuerdo con Bloom (2007) cuando señala que leer provoca el deseo de ser mejor de lo que uno es (aunque no pueda) o importa, para que los individuos tengan la capacidad de juzgar y opinar por sí mismos,...
Para mi la literatura se ha convertido en una gran consejera, amiga, guía y terapeuta; gracias a ella he podido ampliar mi entendimiento y todo lo que éste conlleva; me ayudado a usar más y a echar a volar mi imaginación; me ha permitido ser más empática con las personas con las que cotidianamente convivo y me relaciono (aunque en ocasiones me cuesta mucho); me ha servido también en mi labor como tutora pues me ha permitido, a través de la ficción, saber cuan complejos somos los seres humanos.
Ahora debo decir que amo más a la literatura porque me ha permitido incorporarme a una maestría tan placentera como la de Lectoescritura, que me está ayudando a ponerle nombres a todos los regalos que desde hace siete años me ha dado la LITERATURA.




miércoles, 6 de febrero de 2013

 
UN DÍA
 
 
Este es uno de esos días en los que no sabes por qué, a pesar de estar el sol en todo su esplendor, para ti es un día gris.
Hace un buen tiempo que empezamos a ser las mejores amigas, además de hermanas; hemos compartido  confidencias que nadie más ha escuchado, aunque no era tanto el tiempo que nos veíamos, parece que una fuerza energética, además del amor fraternal, nos ´mantenía en gran contacto.
Sí, hemos sido "inseparables" pero hoy llegó el día de poner aun más distancia entre nosotras, el corazón está triste, hay momentos de llanto pero después  vienen los pensamientos positivos: "te irá muy bien, estaremos cerca, siempre te querre, nos veremos pronto, cuidate mientras tanto". El corazón no está tranquilo necesita de algo que le reconforte y ese algo aparece en cada historia que es relatada en "Atrapadas en la escuela"; historias tan cercanas, tan familiares, tan parecidas a la vida real que es imposible dejar pasar por desapercibidas.
Vuelve el gusto y el placer que ahora se está haciendo más grande en torno a la lectura; el corazón encuentra nuevamente tranquilidad y esas historias hacen que la vida real vuelva a recomponerse y a tomar un nuevo aliento.
Un día pense en lo hermoso que debía ser poder escribir como Marcela Guijosa en su Querido Diario, sucesos triviales y otros no tanto pero siempre compartiendo con las lectoras sus angustias, miedos, alegrías, logros, triunfos, satisfacciones,...; quiero emular esto pero aún estoy en formación, espero que ese día llegue y pueda sentir alegría por poder escribir con el corazón pero también como una escritora competente como lo señala Cassany.